SIGNIFICADO DEL LENGUAJE CORPORAL DE TU BEBÉ
Tras su llegada al mundo y la imposibilidad de no poder hablar, la forma que el bebé tiene de poder comunicarse de alguna forma es mediante su cuerpo.
Será la persona que está con el recién nacido, la que aprenda a identificar qué quiere decirle con sus gestos y ruidos.
Desde su nacimiento, el bebé ya está en modo aprendizaje y de subsistencia. Un ejemplo claro de ello es, la capacidad que tienen nada más nacer, de cómo es capaz de buscar instintivamente el pezón de la madre y poder alimentarse. Con el tiempo, además, nos iremos dando cuenta que cuando le acercamos al pecho para amamantar por ser la hora de comer, el bebé se va relajando.
Del mismo modo identificamos que tiene hambre cuando empieza a chuparse las manos o el puño.
Hay un lenguaje claro que también vemos desde el principio y que identificamos del bebé. El llanto, nada más nacer, comienza a llorar, sale del vientre donde ha estado nueve meses de forma segura y tranquila, y se comunica con el llanto manifestando su malestar.
El llanto por lo tanto lo relacionamos desde el primer momento como que algo no le gusta al bebé. Al igual que pasa con otro tipo de lenguaje, a medida que pasan los días, reconoceremos mucho mejor el motivo del llanto.
Puedes saber más sobre porque llora un bebé pinchado aquí.
La mayoría de los bebés reconoce la voz de su madre apenas nacen, y tardan algunos días en reconocer al padre.
Lo contrario del llanto suele ser movimientos enérgicos, cuando el bebé patalea y se mueve mucho. Suele ocurrir cuando se interactúa con él. Bien cuando estamos jugando, cantándole, hablándole o bañándole. Son en esos momentos donde se muestra feliz y contento, y lo demuestra con esos movimientos tan graciosos.
Otro dato curioso es que recién nacidos solo localizan objetos que están aproximadamente a 25 cm de su cara, que es aproximadamente la distancia entre su madre y el a ser amamantado.
Hemos hablado del llanto y su significado. Puede ser que el llanto vaya acompañado de otros gestos corporales que confirman en cierto modo el motivo del mismo.
Cuando un bebé junto con el llanto muestra rabia apretando los puños o estirando los brazos, puede que el motivo sea que necesite cambiar los pañales o que tenga hambre.
Si por otro lado al llanto le acompaña bostezos, o frotarse los ojos, lo más seguro es que necesite descansar. Cógelo en brazos, mecelo, e irás observando como estos gestos lo va relacionando el bebé con lo que vas a hacer y el mismo se irá calmando.
CÓMO COMUNICARTE TÚ CON TU BEBÉ
Todos los padres, de una u otra forma están preocupados por cómo ejercerán de padres una vez que nazca el bebé, si lo podrán hacer bien o no.
Tu propio instinto también te ayudará a comunicarte con tu bebé. En cierto modo ya te hemos dicho como hacerlo, pero te lo resumimos un poco.
Observa mucho, mira como se mueven sus extremidades y aprende a reconocer sus estados de ánimo. Por la hora del día podrás identificar que le pasa con más seguridad, si es hora de comer, de descansar o de jugar.
Habla con él, cántale, sonríe y disfruta los momentos del día. En poco tiempo sabrás con alto porcentaje de probabilidad que es lo que necesita tu bebé.
Ahora si te gustó, compártelo por favor.